RUTAS NATURALES

CANAL DE SOMAHOZ
PEÑA DEL MORO, SAN ANDRÉS, SOMAHOZ

 

DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO

Desde el barrio de San Andrés, en Los Corrales de Buelna, iniciaremos la ruta junto al herradero de

Bandabarreda, tomando la primera cambera a la derecha, hacia la Peña el Moro.

Atravesaremos el río Redondo por un camino que discurre enmarcado entre los tradicionales cerramientos de piedra de los prados y ascenderemos por una pista de hormigón de fuerte pendiente que nos conducirá al área de La Retuerta. Acompañados por un bosquete de robles, avellanos y salces, bordearemos la plantación de “el día del árbol” y el camino nos llevará hasta un pequeño mirador desde el que observar el Valle de Buelna.

En este punto nos adentraremos en una zona de canteras y comenzaremos el zigzag que nos conducirá a lo alto de la Peña el Moro (378 m), un acceso antaño creado por las gentes del valle para salvar el gran desnivel del terreno a la hora de poder transportar las losas mediante nárria. Si nos fijamos, aún podremos observar las huellas que los diferentes métodos de extracción han dejado en la piedra; marcas de cuñeras y tajaderas en los bloques de arenisca que encontraremos en los primeros tramos, así como marcas de hendiduras de pistoletes realizadas para introducir explosivos, éstas ya concentradas en los grandes bloques de los tramos superiores.

Llegaremos a la cima y tras disfrutar nuevamente de las espléndidas vistas del Valle de Buelna al completo, nos dirigiremos hacia el Este atravesando las antiguas brañas hasta adentrarnos en una zona de bosque. Descenderemos por una senda marcada por el tránsito de animales hasta cruzar el regato del río El Saltón. A partir de aquí seguiremos el camino paralelo al curso de agua y que nos introduce en un bello bosque de avellanos, acebos, cajigas y castaños, mezclados ya con plantaciones de eucaliptos. Mientras disfrutamos de un camino de gran riqueza natural salpicado por inquietos riachuelos, enlazaremos con la cambera de aprovechamiento forestal que nos devolverá nuevamente al barrio de San Andrés a una zona de prados de siega, no sin antes pasar por delante del antiguo depósito de agua de la fábrica Quijano, construido a principios del siglo XX.

 

CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS:

Longitud del recorrido: 4,10 km

Duración aproximada: 1,30 horas

Dificultad: baja

Altura mínima: 115 metros

Altura máxima: 378 metros

Tipo de itinerario: circular

Desnivel positivo acumulado: 285 m

Desnivel negativo acumulado: 285 m

Época recomendada: todo el año.

CALZADA MONTE FRESNEDA Y MONTE GEDO, LA CONTRINA

 

DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO

Tras tomar la carretera de la derecha que asciende al Barrio de La Contrina, iniciaremos la ruta que nos llevará al emblemático bosque del Monte Fresneda. Rodeados por históricas cajigas, avellanos blancos y acebos, recorreremos un pequeño sector de la calzada, de poco más de 2.000 metros, que comunicaba Pisoraca (Herrera de Pisuerga), con Iulióbriga (Retortillo) y con Portus Blendium (Suances).

Caminaremos por varios tramos de encachado (empedrado de cantos rodados), para llegar a una bifurcación en la que deberemos tomar el desvío a la izquierda. No obstante, en este punto de la ruta, tendremos la opción de seguir nuestro camino unos metros para así poder disfrutar de varios tramos más de calzada, el llamado “sector 2”.

Ascenderemos por una pista forestal que atravesará el bosque hasta abordar la carretera de Collado, donde giraremos a la izquierda en dirección al Monte Gedo. Al traspasar el sistema de confinamiento de animales retomaremos las pistas forestales y seguiremos nuestra senda nuevamente por la alternativa de la izquierda. En este punto comenzaremos a recorrer un frondoso bosque de pinos, con castaños, cajigas, algunas jayas e incluso fresnos, interrumpido por zonas de prados de siega. Si realizásemos el sendero a primera o a última hora del día, no es de extrañar encontrarnos con alguna familia de ágiles corzos cruzando monte a través.

Una vez que estemos ya en el mirador del Gedo, podremos disfrutar de las espléndidas vistas que nos ofrece el Valle de Buelna. Continuaremos la ruta ahora por un estrecho sendero que vuelve a introducirnos en una bella zona boscosa salpicada por pequeños riachuelos, en la que recordaremos los tradicionales oficios de las gentes del valle al encontrarnos con antiguos refugios y vetustas canteras de piedra.

Caminaremos sorteando obstáculos hasta llegar nuevamente a una pista forestal que nos conducirá al mirador de Tojos, desde el que gozaremos de una magnífica visual del Valle de Cieza. A partir de aquí conectaremos con la carretera de Collado para retomar el camino del Monte Fresneda que nos devolverá a nuestro punto de partida.

 

CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS:

Longitud del recorrido: 12,10 km

Duración aproximada: 3,30 horas

Dificultad: media

Altura mínima: 157 metros

Altura máxima: 399 metros

Tipo de itinerario: circular

Desnivel positivo acumulado: 412 m

Desnivel negativo acumulado: 412 m

Época recomendada: todo el año.

SENDA FLUVIAL DEL BESAYA (SOMAHOZ – CIEZA)

Esta senda discurre siguiendo la margen izquierda del río Besaya, partiendo desde Somahoz, en Los Corrales de Buelna, y adentrándose en el municipio de Cieza.

El itinerario así constituido aprovecha en gran medida el antiguo trazado de la carretera N-611 y permite acercar a vecinos y visitantes al Besaya. La tipología de la ruta, de pendientes suaves, y su entorno (al estar encajado en el valle, siempre en paralelo al cauce, es factible contemplar, donde la vegetación lo permite, las limpias agua del río, y escuchar su transitar en prácticamente todo el recorrido, todo ello con la seguridad que ofrece la lejanía del tráfico rodado) hacen de ella un lugar idóneo para realizar ejercicio físico, acceder a las riberas para practicar la pesca, darse un cole, o, sencillamente, relajarse y disfrutar del paisaje.

El río Besaya, con un recorrido prácticamente rectilíneo de 47 kilómetros, nace en la localidad campurriana de Fresno del Río a 870m de altura y desemboca en el río Saja en Torrelavega. A lo largo de la senda fluvial es posible observar los peculiares rasgos geológicos del valle del Besaya, no existentes en ninguna otra región cántabra.

La principal estructura son bloques de areniscas triásicas en los que se entremezclan arcillas violáceas del triásico superior y calizas masivas del Carbonífero. La existencia de la carretera nacional actual permite contemplar excelentes cortes de la serie triásica.

La flora y fauna existente es la clásica de un ecosistema fluvial. Así, se puede observar la vegetación característica de un bosque de ripario, con predominio de árboles, como avellanos, alisas, jayas y fresnos, junto con otras especies arbustivas, como la zarzamora o el espino albar, y herbáceas como la salvia o el orégano.

En lo que respecta a la fauna, el camino se erige como un excelente lugar desde el que poder contemplar, si se dispone de paciencia y un poco de suerte, algunos de los animales que forman parte del ecosistema, como pueden ser mamíferos, como la rata de agua, el turón, e incluso la nutria, aves, como la tórtola, la garza o el pico real, o reptiles, como la culebra de agua, además de peces propios de aguas de gran calidad, como la madrilla o el salmón.

CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS:

Longitud del recorrido: 2,44 km

Duración aproximada: 40 minutos

Dificultad: baja

Altura mínima: 103 metros

Altura máxima: 146 metros

Tipo de itinerario: lineal

Desnivel positivo acumulado: 25 m

Desnivel negativo acumulado: 25 m

Época recomendada: todo el año.

RUTA DEL PICO DEL ACEBO Y MOZAGRO, COO